Es un sencillo pero delicioso aperitivo, salvo por el peligroso "aroma" que nos deja en la boca, ideal para compartir en buena compañía, con un buen pan y una buena botella de vino tinto.

Nos ponemos el delantal y a disfrutar...

 Ingredientes

3 cabezas de ajo (sin pelar)

2 hojas de laurel
2 ramitos de romero fresco
25 g. de mantequilla
1 chorro de miel
sal gruesa
80 g.  de aceite de oliva virgen extra

Precalentamos el horno a 200 ºC. Cortamos la parte superior de las dos cabezas de ajo y colocamos boca abajo en un recipiente de cristal apto para el horno. Añadimos el resto de ingredientes y metemos al horno por espacio de 30-40 minutos aproximadamente.


Mientras, retiramos la tapa de la caja del camembert, el plástico que le envuelve y la etiqueta que suele traer pegada. Hacemos un corte en cruz en la parte superior y reservamos.

Cuando hayan transcurrido 25 minutos, metemos el queso con la parte inferior de la caja y dejamos que se funda hasta que el ajo esté bien blando.


Sacamos todo del horno y presentamos en una bandeja o fuente acompañados por una deliciosa hogaza de pan. Que no te falte una buena copa de vino tinto.


Espectacular tentempié para disfrutar en compañía, siempre y cuando sea de confianza, que ya sabes lo que pasa con el ajo, je je.

Espero que te guste.

Nota: Esta receta es una muestra ejemplar de la sencillez y facilidad con la que consigue estupendos platos la chef británica Lorraine Pascale.

Es recomendable utilizar unas buenas cabezas de ajo, de buena calidad y con mucho sabor, porque el resultado dependerá muchísimo de este detalle.